Recientemente se habla y se especula mucho sobre la realidad de la rentabilidad en un taller de chapa y pintura, y salen a relucir términos tan simples como “comprar barato para reducir costes” e “invertir menos tiempo en cada reparación”. Pero debemos plantearnos una pregunta seria: ¿es este el verdadero camino para la mejora?
Te adelantamos que la respuesta es NO, pero a continuación te la explicaremos con más detalle. Te damos todos los detalles sobre cómo sacar verdadera rentabilidad en los talleres de chapa y pintura.
EFICIENCIA Y RENTABILIDAD EN UN TALLER DE CHAPA Y PINTURA
Si en un circuito en línea recta, dos automóviles hacen una carrera, a la meta llegará antes el coche que más corra. De esta misma forma, esto es lo que se nos sugiere cuando se nos da este tipo de consejos. No son indicaciones de mejoras, son obviedades.
Siguiendo el ejemplo anterior, si en el mismo circuito establecemos una serie de curvas en el recorrido del mismo ya entra en juego la habilidad del piloto, la cual es decisiva en los tramos en los que los distintos vehículos no pueden superar cierta velocidad y por tanto entra en juego el factor humano.
Si hacemos esta misma analogía con el día a día del taller de chapa y pintura encontramos que el piloto sería el pintor o chapista, los vehículos son las herramientas, sistemas de preparación de pintura, técnicas de lijado y por supuesto la velocidad de secado que ofrecen los distintos sistemas de pintura.
RENTABILIDAD EN LOS MATERIALES
A la hora de hablar de rentabilidad en el taller de chapa y pintura, los conceptos claves son, por lo tanto, la rentabilidad del material comprado vs. material facturado en peritaciones y, en mayor medida, el tiempo comprado vs. el tiempo vendido o facturado.
Actualmente existen sistemas de lijados que ofrecen discos a 20 céntimos el disco y otros a 40 céntimos. Hace años, cuando el mercado llevaba otro camino totalmente distinto y la mano de obra se pagaba de otra manera, cualquier empresa se decantaría por el de 20 céntimos.
Sin embargo hoy en día, cuando sabemos que el taller tiene, con respecto a los gastos, el 40% destinado al recambio, el 10% en la pintura y el 50% en la mano de obra, impera más el disco de lija que rinde más metros y que aguanta mucho más, es decir, el de 40 céntimos.
Este disco, que a priori no es la mejor opción por ser más caro, rinde más e invierte menos tiempo en quitar y poner el nuevo abrasivo. Si el tiempo, como ya hemos comentado, es lo más valioso, la preparación se lleva el 75% de la reparación y 25% el repintado del automóvil.
RENTABILIDAD EN LA PINTURA
Llevados al sistema de pintura, pasa exactamente lo mismo, salvo que lo medimos en euros, de los cuales el 75% se destinan a la pintura y 25% a los anexos (estos datos son medias del sector).
Muchos talleres se decantan, desde el desconocimiento, por un litro de pintura por ejemplo de 50€, cuando para pintar el vehículo necesitan litro y medio (75€ en ese supuesto), cuando existen sistemas de pintura cuyo litro puede ascender a los 80-90€. Pero solo se necesita 75 g por pieza, o por redondear pongámosle 700 g en un completo en vez del litro cuyo resultado final son menos de los 75€ anteriormente comentados, y eso solo con el precio.
Si adjuntamos a ello las propiedades de húmedo sobre húmedo en lugar de las dos manos y media de pintura (con sus correspondientes tiempos de secado entre mano y mano), los aparejos de secado al aire así como los barnices de la misma tecnología (suponiendo esto el ahorro correspondiente de suministro energético/combustible que, actualmente está entre 18-24 €/hora), etc.
Es de esta forma cuando obtenemos la verdadera rentabilidad en un taller de chapa y pintura y se reducen verdaderamente los costes.
CONTROL EN LOS KPI
Todo lo comentado y hablado hasta ahora es PERFECTAMENTE plasmable y demostrable con números a día de hoy.
Con el sudor del día a día lleváis negocios impensables de gestionar muchas veces por medios propios y mucho menos sin las ventajas que las herramientas ofimáticas y avances tecnológicos que día a día van sucediendo.
Desde Perchan, os recomendamos que solicitéis a vuestros partners esta gestión. Un taller que factura 8 horas al día, 5 días a la semana y 4 semanas al mes (datos por convenio) no debería descuidar el tiempo de cada reparación. SIEMPRE sin mermar ni un ápice la calidad final.
Pero, ¿realmente quieren vuestros partners ayudaros a entender cómo mejorar la rentabilidad en un taller de chapa y pintura? ¿O no les conviene?
Director Comercial y Marketing.